Muerta la paz en una rencilla bien de entrecasa,campea el sino a sus anchas por las habitaciones,
se descoyuntan las estrategias del cautiverio
y en el refugio de un bar perdido en el conurbano,
desesperando a una camarera con dos cigarros
y un whisky estoy mucho mas a gusto que en mi sofá.
Pero ya empieza a hacerse muy tarde en todo sentido
y en el mas amplio y cruel sinsentido de la palabra,
siempre es muy tarde para el sentido del mutuo acuerdo
que se confirma en las sobremesas de un mediodía
y aún es mas tarde para el sentido infiel de las sillas
que yacen yertas patas arriba adentro del bar.
8 comentarios:
Prometen
las mesas patas arriba sobre las mesas de un bar me impresionan casi tanto como el humito sobre las vías visto desde un andén vacío.
La dimensión del quilombo doméstico jode y más cuando uno está enrolado en el gremio de la gilada que quiere de verduski, pero si por un rato, aunque más no sea, vas a dar con semejante camarera y bue...loco, el cuore es grande y total... se ve que la cosa no pasó de boceto.
...y por consiguiente adeudan, Número Uno.
Entiendo que lo que usted expresa hablando de las "mesas" patas arriba sobre las mesas de un bar, Viruta, se trata de un lapsus linguae ya que yo me refería a las "sillas" patas arriba, pero como no creo que los lapsus sean errores, sino metamensajes opcionales que me despiertan la curiosidad, le diré que la imagen de unas mesas invertidas sobre otras mesas de un bar me dejan una sensación mas de "cierre definitivo" que de "cerrado hasta mañana".
La poesía tiene esa dulce posibilidad de mentir sin mentir del todo, Manu.
Tomi, como va, soy un escritor Under Ilegal Clandé de Buenos Aires y quisiera entregarte un texto corto para que leas, que por ahi te puede interesar, o despertar alguna cosa interesante, o solo compartir un momento de transehunte. A donde te puedo escribir? Saludos Sebakis
O key, Sebakis, te dejo un e mail:
tomi.muller@gmail.com
Publicar un comentario